Los espermatozoides
Los espermatozoides son los constituyentes celulares del semen. El espermatozoide pasa por distintas etapas o formas celulares antes de llegar a su madurez.
Estos precursores se ordenan como si de una pila de monedas se tratara en la pared del túbulo seminífero, de tal manera que la célula mas primitiva o espermatogonia se sitúa en la región mas externa del cilindro y el espermatozoide maduro en contacto con la luz del túbulo.
En la zona intermedia, y en orden según el desarrollo madurativo, se disponen:
-el espermatocito 1.
-el espermatocito 2.
-la espermatide, que es la ultima generación de células previa a la transformación en el espermatozoide.
Cada etapa de cambio celular dura aproximadamente 16 días. Un ciclo completo, o espermatogenesis dura 64 días.
Los espermatozoides maduros son células alargadas que miden de 55 a 65 micras de longitud. En un milímetro cúbico de semen hay unos 60000 y en una eyaculación se emiten de 200 a 600 millones.
Están compuestos por una cabeza, en forma de pera, de 4 a 5 micras de tamaño, que contiene un núcleo y varios encimas proteolíticos, y una cola que, en su proporción terminal, adopta la forma de un flagelo, gracias al cual el espermatozoide puede moverse a una velocidad máxima de 1 a 3 mm. por minuto y llegar al óvulo para fecundarlo.
En el momento de la unión entre el espermatozoide y el óvulo se segregan las enzimas contenidas en la cabeza del primero y con su acción se separan las células de la capa que envuelve al óvulo para facilitar el traspaso a este ultimo del material genético almacenado en el núcleo del espermatozoide.
Durante la maduración y la transformación de las células germinales se producen divisiones que conducen a que el espermatozoide solo contenga la mitad de los cromosomas, o sea 23. en el desarrollo del óvulo femenino sucede una evolución parecida y, al final, su rotación cromosómica es también 23 elementos.
Cuando se produce la fecundación, el espermatozoide se une al óvulo, se restablece los 46 cromosomas, dispuestos en 23 pares, con la particularidad de que un miembro de cada par es de origen materno y el otro paterno.
En el curso de una relación sexual, el liquido seminal queda a las puertas del cuelo uterino para que los espermatozoides inicien su alocada y difícil carrera en busca del óvulo al que fecundar.
Estos precursores se ordenan como si de una pila de monedas se tratara en la pared del túbulo seminífero, de tal manera que la célula mas primitiva o espermatogonia se sitúa en la región mas externa del cilindro y el espermatozoide maduro en contacto con la luz del túbulo.
En la zona intermedia, y en orden según el desarrollo madurativo, se disponen:
-el espermatocito 1.
-el espermatocito 2.
-la espermatide, que es la ultima generación de células previa a la transformación en el espermatozoide.
Cada etapa de cambio celular dura aproximadamente 16 días. Un ciclo completo, o espermatogenesis dura 64 días.
Los espermatozoides maduros son células alargadas que miden de 55 a 65 micras de longitud. En un milímetro cúbico de semen hay unos 60000 y en una eyaculación se emiten de 200 a 600 millones.
Están compuestos por una cabeza, en forma de pera, de 4 a 5 micras de tamaño, que contiene un núcleo y varios encimas proteolíticos, y una cola que, en su proporción terminal, adopta la forma de un flagelo, gracias al cual el espermatozoide puede moverse a una velocidad máxima de 1 a 3 mm. por minuto y llegar al óvulo para fecundarlo.
En el momento de la unión entre el espermatozoide y el óvulo se segregan las enzimas contenidas en la cabeza del primero y con su acción se separan las células de la capa que envuelve al óvulo para facilitar el traspaso a este ultimo del material genético almacenado en el núcleo del espermatozoide.
Durante la maduración y la transformación de las células germinales se producen divisiones que conducen a que el espermatozoide solo contenga la mitad de los cromosomas, o sea 23. en el desarrollo del óvulo femenino sucede una evolución parecida y, al final, su rotación cromosómica es también 23 elementos.
Cuando se produce la fecundación, el espermatozoide se une al óvulo, se restablece los 46 cromosomas, dispuestos en 23 pares, con la particularidad de que un miembro de cada par es de origen materno y el otro paterno.
En el curso de una relación sexual, el liquido seminal queda a las puertas del cuelo uterino para que los espermatozoides inicien su alocada y difícil carrera en busca del óvulo al que fecundar.